PEREIRA, COLOMBIA (2006 ddC) - Las mujeres de la ciudad de Pereira, en la región cafetera de Colombia, iniciaron una huelga sexual que denominan de "piernas cruzadas," con la que buscan presionar para que sus esposos y novios depongan las armas como parte de un programa para reducir la violencia.

El asesor de convivencia de la alcaldía de Pereira, la capital del departamento de Risaralda, Julio César Gómez, dijo el martes que la iniciativa de un grupo de mujeres surgió luego de una reunión en la que se analizaron estrategias para buscar el desarme de pandillas que tienen presencia en esa ciudad.

"Este fin de semana, tuvimos una reunión con un grupo de esposas, novias y amigas de estos grupos pandilleros en donde nos manifestaron su preocupación por la renuencia de algunos de ellos a entregar las armas y fue ahí en donde surgió esa propuesta de una vigilia o un paro sexual," declaró Gómez a Reuters.

Pereira, con 480.000 habitantes, registró 480 muertes violentas en el 2005, por lo que la alcaldía busca reducir esa cifra con un programa de desarme.

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ATENAS, GRECIA (411 adC) - Aristófanes escribe la comedia Lisístrata. La campaña de "Sin paz, no hay sexo", es la idea por medio de la cual las mujeres convocadas por Lisístrata se proponen acabar con la guerra.

En esta obra Aristófanes muestra el papel que la mujer podría jugara en la sociedad griega. Es una mujer apoyada por otras representando a comunidades como Beocia y el Peloponeso, que a pesar de no tener derecho de opinión e información acerca de los acontecimientos bélicos, demuestran que tienen conocimientos sobre éste y otros temas, expone la realidad de las mujeres, la vida marital en tiempos de guerra, donde la mujer envejece y muere con la responsabilidad de la familia y además vive con la incertidumbre de la situación de los seres que ama.

La trama se desenvuelve cuando Lisístrata, temerosa de la total destrucción de Grecia, expone ante ellas un plan:

Las mujeres privarán del tálamo a sus maridos, sólo los recibirán cuando ellos decidan hacer la paz. Sin embargo, Lisístrata enfrenta la indecisión de algunas mujeres, pues a pesar de su juramento vacilan frente a la grave renuncia y amenazan con desertar, pero advierte que si son pacientes lograrán la victoria. El poder de la mujer se pone de manifiesto, usa su inteligencia para poner fin a la guerra y tener de regreso a sus esposos, tal vez no son tan fuertes como para enfrentarse en un combate azaroso, pero son capaces de utilizar la palabra y elaborar excelente estrategia antes que la fuerza y violencia; la mejor forma es explotando las sensuales cualidades características de las féminas. Los hechos terminarán por dar la razón al sexo femenino y los hombres conciertan la paz para así poder llevar a sus mujeres a casa.

Etiquetas: humor, sociedad