lunes, octubre 03, 2005

 

La tierra de mi sombrero (y IX): negociación, despedida y vuelta

Nos faltan cuatro gorros para volver todos cubiertos a España, entre ellos el mío. Y los que hay colgados en algunas puertas de las habitaciones de la longhouse son más espectaculares que los que compramos en la otra longhouse. Están recubiertos por una tela estampada de colores, similar a las que usan para sus sarong. Uno de ellos, de fuerte colorido, me encanta. Soy un poco hortera. Nos lanzamos a negociar. Finalmente pagamos 15 ringits por cada uno, es decir, menos de 4 euros.

Para matar el tiempo hasta la hora de vuelta vamos a hacer un trekking por la selva con nuestro guía-piloto-traductor-yloquehagafalta, volvemos a la longhouse, nos dan de comer (más licor de arroz), un último baño en el mismo sitio de ayer y a la canoa. Los niños salen a despedirnos. Han sido 24 horas inolvidables.


Triste despedida (24 horas supieron a muy poco)

La vuelta es más rápida. Es río abajo. Llegamos a Kapit a punto para coger el último bote hacia Sibu. Hacemos noche en Sibu, donde por cierto conocemos en un garito de muy dudosa reputación a unas cantantes filipinas con unas faldas sorprendentemente cortas y que cantan fatal...(*) pero esa es otra historia.

Al dia siguiente salimos para Kuching y, sin parar allí ni una hora, lo justo para reservar algunas de las escasas camas que hay en nuestro destino, embarcamos de nuevo, ahora hacia el parque nacional Bako. El bote no nos puede llevar hasta la costa así que nuestra llegada al parque por mar es bastante espectacular...


Desembarco en Bako con sombreros

Y como en algún punto hay que cortar la historia la termino aquí, tomando el sol en las playas del parque nacional Bako. Por cierto, es otro lugar muy recomendable para los que huyen del turismo masivo: cuenta con un total de 98 camas pequeñas repartidas entre 12 bungalows y 18 plazas más en un camping. Si no se tiene plaza para dormir sólo te dejan entrar al parque con un permiso de día. Así que por la noche se dispone de 2700 hectáreas para un máximo de unas 100 personas... (270000 m2 por persona, con selvas y playas para pederse).


Hoy ocupa un lugar en mi dormitorio

(*) Y hablando de garitos, si en Kapit pasáis por el karaoke no entréis salvo que lo que vayáis buscando sea un puticlub... No es difícil de encontrar. En realidad te encuentra él a ti pues las chicas te llaman a gritos desde la puerta.

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comentarios:
Bonito final para una gran historia. La próxima, en vez de poner la foto de cómo queda colgado, pon la foto de cómo recibes a las visitas...
 
ah, joder, ahora entiendo a qué recibimiento te refieres... jajaja te refieres a con el gorro puesto y bermudas de flores?
 
lo de al lado del sombrero es un didjeridoo?
 
correcto! pero no australiano, de donde son los más conocidos, sino de Sarawak, en Borneo
 
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