miércoles, junio 22, 2005

 

Los muy nobles Premios Ig Nobel (y IV): hasta hoy

En 1997, el Ig Nobel de “Literatura” bien podría haberlo sido de “Criptografía”. Doron Witztum, Eliyahu Rips y Yoav Rosenberg de Israel y Michael Drosnin de los Estados Unidos descubrieron que el libro del Génesis contiene un código secreto oculto. Demostraron que cuando el libro del Génesis se escribe en una matriz bidimensional, secuencias de letras equidistantes que construyen palabras de significados relacionados suelen aparecer muy próximamente, desarrollando herramientas cuantitativas de análisis estadístico para medir ese fenómeno.


El código secreto del Génesis (Ig Nobel 1997 en Literatura).

La “Ingeniería de Seguridad” fue premiada con un Ig Nobel en 1998 en la figura de Troy Hurtubise, de North Bay, Ontario (Canadá). Troy obtuvo la distinción por haber diseñado y construido a lo largo de más de veinte años y luego probado personalmente una armadura de sesenta y siete kilos de peso capaz de resistir el ataque de los osos pardos. El mérito de Troy es aún mayor si se tiene en cuenta que North Bay está situado a unos 3200 tranquilizadores kilómetros del oso pardo (en libertad) más cercano. Según sus propias declaraciones su motivación fue puramente científica:

“el oso pardo tiene mucho que ofrecer a la ciencia, pero no te puedes acercar a uno de ellos con tiempo para hacer ciencia, te mueres antes”.

Uno de los premiados Ig Nobel en “Física” en 1999 fue Jean-Marc Vanden-Broeck, actualmente profesor de matemáticas en la Universidad de East Anglia (Reino Unido). Tras diecisiete años de investigaciones financiadas por la marina, la fuerza aérea y la National Science Foundation de los EEUU, mientras trabajaba en la Universidad de Wisconsin, el investigador de dinámica compleja de origen belga ha calculado cómo fabricar una tetera que no gotee. El Profesor Vanden-Broeck, que nunca bebe té, declara:

“la tetera siempre ha sido un problema”.

No incluimos imágenes de su aportación científica, pero la fotografía del propio premiado que puede encontrarse en su página web personal nos recuerda al objeto de los desvelos de Troy Hurtubise.

Y llegamos al año 2000, único hasta el momento en el que un premio Ig Nobel ha sido entregado en la disciplina de “Informática”. Chris Niswander de Tucson, Arizona (EEUU), desarrolló un programa que puede servirte para detectar si un gato ha estado caminando sobre el teclado de tu computador en tu ausencia. El programa, sin duda el producto estrella de la empresa BitBoost Systems y comercializado como PawSense, puede comprarse por tan solo veintiún euros (más gastos de envío).


Programa para detectar gatos tecleando (Ig Nobel 2000 en Informática).

Uno de los más importantes logros premiados con un Ig Nobel es sin duda el conseguido conjuntamente por John Keogh, de Hawthorn (Australia), y por la oficina de patentes de Australia en el año 2001 y premiado en la categoría de “Tecnología”. Se trata de un invento patentado con el número 2001100012 el día 2 de agosto de 2001 en esa oficina de patentes. Según el resumen aportado, se trata de un dispositivo circular para facilitar el transporte que incluye una llanta circular, un cojinete en el que una hendidura cilíndrica permite encajar una barra que gira, y unas estructuras auxiliares que aseguran que la llanta y la barra permanezcan estables, y la barra siempre girando en un plano perpendicular al plano de la llanta y situada en el centro de la superficie de la misma. Una imagen muy esclarecedora incluida por John Keogh en la documentación de la patente puede verse en la figura.


Dispositivo circular para el transporte (Ig Nobel 2001 en Tecnología).

En el año 2002, el Ig Nobel de “Matemáticas” recayó en los profesores K.P. Sreekumar y G. Nirmalan (éste último a título póstumo) de la Universidad de Agricultura de Kerala (India) por su artículo publicado en la revista Veterinary Research Communications sobre la estimación de la superficie total del cuerpo de los elefantes indios.

El Ig Nobel 2003 en “Ingeniería” ha hecho finalmente justicia a los auténticos creadores de la Ley de Murphy. Se otorgó conjuntamente a John Paul Stapp, Edward A. Murphy, Jr., y George Nichols (en el caso de los dos primeros a título póstumo), por haber creado en el año 1949 el principio básico de la ingeniería que asegura que “si hay dos o más formas de hacer algo y una de ellas puede conducir a una catástrofe, entonces algún ingeniero lo hará de esa forma”. Recogió el premio Edward A. Murphy III, en nombre de su padre.

En septiembre de 2004 se celebró en el Sanders Theatre de la Universidad de Harvard la ceremonia de entrega de premios de la última edición y quedó abierta la convocatoria para los Premios Ig Nobel 2005.

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comentarios:
jajajajajajaja, premios merecidísimos!!!!
 
“si hay dos o más formas de hacer algo y una de ellas puede conducir a una catástrofe, entonces algún ingeniero lo hará de esa forma”

Que cierto.....,jaja.

También me he quedado con el del gato...que gente mas rara hay en el mundo...
 
anda mira javifil, tienes otro lector! y ya van 4!
 
jeje, si Pin, al menos 8, por orden de antigüedad: el Amor es para los feOs, pin, villavelez22, DeAtH HaS cOMe, Damodar, elaragon, Aeris (bienvenido Aeris), aparte de un Anonymous...

qué responsabilidad, qué presión!
 
por cierto, nuevo post en pin consulting ...
 
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