jueves, mayo 25, 2006
Pueblecicos: Serveto
El 27 de octubre de 1553 un hombre desarrapado, con el jubón comido por los piojos y barba de varias semanas camina renqueante y cansino escoltado por un escuadrón de arqueros por las calles de Ginebra. Su mirada apagada revela una mezcla de desconcierto, abandono y alienación. La triste comitiva llega a la colina de Champel. Allí los alguaciles le llevan a una estaca de madera rodeada de haces de leña todavía verdes y le colocan una corona de paja y follaje rociada de azufre. Luego sujetan su cuerpo a la estaca con una cadena de hierro, le colocan uno de sus libros, la Christianismi Restitutio, en sus brazos y atan su cuerpo fuertemente con una cuerda gruesa.
El verdugo atiza el fuego en su rostro y el reo da un alarido que horroriza a la multitud. El suplicio se prolonga largo tiempo, al ser leña verde la utilizada para consumar el sacrificio. Algunos asistentes al horrendo espectáculo arrojan leña seca a la pira para mitigar el sufrimiento del reo. Dando un gemido espantoso, el condenado expira.
Así describió un testigo los últimos momentos de Miguel Serveto, acusado de herejía por Calvino, condenado por el Ayuntamiento de Ginebra y ejecutado en la hoguera.
La familia Serveto era originaria de este pequeño pueblo del mismo nombre situado en el Pirineo oscense perteneciente al señorío de Sobrarbe. Conforme iba avanzando la reconquista, muchos nobles e infanzones pirenaicos se trasladaron a las tierras conquistadas para acogerse a los beneficios de las Cartas de población que otorgaban los reyes de Aragón. Los antecesores de Miguel Serveto debieron aprovechar estos beneficios y extenderse por lo que hoy es la provincia de Huesca, hasta llegar a Villanueva de Sijena, donde nació Miguel.
De origen medieval, Serveto formó “La Comuna” junto con Sin y Señes. Actualmente depende del ayuntamiento de Plan.
Merece la pena llegar hasta este valle escondido y visitar el pueblo, y perderse por las callejas, y reencontrar estas casonas con sus escudos, y hablar con los lugareños deseosos de contar su historia.
Etiquetas: pueblecicos, Sobrarbe
comentarios:
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Serveto ganó muchos puestos en el ranking del Val de Chistau cuando el pasado 30 de agosto a las 4 de la mañana, nos obsequió a los valientes asistentes a sus fiestas con una caldereta colectiva.
Fiestas de obligada asistencia a partir de ahora =D
Fiestas de obligada asistencia a partir de ahora =D
Sobre Servet, altamente recomendado el libro de Stefan Zweig "Castiello contra Calvino". Describe la subida de Calvino al poder y la 'batalla' de este contra Castiello. Y el 'pobre' Servet andaba por alli y sirvio de chivo expiatorio... era un poquillo bocazas y cabezon, como buen aragones...
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